Mercurio, Jed
John Fitzgerald Kennedy le confió a Harold MacMillan que si pasaba tres dÃas sin acostarse con una mujer, sufrÃa terribles dolores de cabeza. El adúltero sujeto de esta investigación, de esta novela de escasa ficción y espléndidos hallazgos, es el mÃtico JFK. El autor no juzga a este ilustre adúltero ni moraliza. El libro es el intenso, divertido, perturbador retrato de un estadista y de una época, y el autor presenta a JFK como un hombre de los tiempos que le tocó vivir, a la vez fuerte y frágil, con oscuros impulsos y deseos privados, y a la vez de gran talento y visión polÃtica. «InteresantÃsimo. La narración es magnÃfica» (Manuel Hidalgo, El Mundo). «Sorprendente y muy divertido» (J. M. Martà Font, El PaÃs).