GARALVA, ROSA
Introducción
	
	No me gusta limpiar
	
	¿Dónde estás ahora?
	
	Observando tu casa
	
	Cómo llegué al método
	      El método
	      Una ayuda, piensa en las consecuencias
	      Aplicando el método
	
	Mantenimiento
	      Repartir la carga de trabajo
	      Limpiar sin limpiar
	      Comenzar a limpiar
	      La familia, trabajo en equipo
	      La limpieza y los niños, herramienta para educar y transmitir valores. ¿Cómo implicarlos  en la limpieza?
	      La pareja, asumir responsabilidades en conjunto
	      El baño
	      Lo que tengo en mi caja de limpieza
	      Salón-comedor
	      Cocina
	      Dormitorios
	      Planifica tu día
	      Cualquier camino empieza con el primer paso
	
	Cuidando nuestro estado de ánimo
	      Limpiando para nuestros sentidos
	      La vista
	      El olfato
	      Tacto
	
	Anexos
	      31 cosas que limpiar
	      Estrategias de limpieza para casos puntuales
	      Cómo elegir los accesorios de limpieza
	      La plancha
	      La aspiradora
	      La lavadora
	      La secadora
	      El lavavajillas
	
	Mis recetas
	      Limpiadores hechos en casa
	      Abrillantador para muebles de madera
	      Limpiador para la ducha
	      Limpiador de pino natural
	      Pececillos de plata
	      Limpiador enzimático
	      Limpiador del exterior del inodoro
	      Limpiador desinfectante
	      Limpiador para las manchas de moho
	      Limpiacristales
	      Ambientador
	     	Ingredientes para usar en atomizador
		Ingredientes para aromatizante en polvo
	
	Epílogo 
Rosa Garalva viene a darle un giro de 180 grados a nuestra manera de entender lo que se conoce como labores del hogar. Se trata de una propuesta fresca, que cuestiona con valentía esa manera convencional, a menudo heredada de nuestras madres, que tenemos de afrontar las tareas de casa. Limpiar, recoger, ordenar, planchar son verbos con mala fama; es aburrido y sólo lo hacemos porque no hay más remedio.
	
	Este libro nos plantea un cambio de paradigma. Persigue dos objetivos. En primer lugar, que entendamos que un entorno permanentemente limpio, agradable y ordenado nos proporciona paz y bienestar, mejora sustancialmente nuestro estado de ánimo y, por ende, la calidad de nuestro tiempo y la convivencia en casa. La propuesta consiste en afrontar las tareas de la limpieza en equipo (se acabó asociar la limpieza a la mujer) y desde la motivación de la recompensa final, no desde el fastidio y la pereza. En segundo lugar, Rosa nos presenta un método sencillo y cargado de sentido común que, partiendo de un análisis crítico de nuestras circunstancias y de nuestras rutinas habituales, nos permitirá optimizar el trabajo de limpieza. Un pequeño cambio de hábitos por parte de toda la familia conseguirá que mantener la casa siempre limpia sea muy fácil. El ahorro en tiempo dedicado a la limpieza será espectacular. Limpiar puede ser también una actividad creativa. Rosa nos propone revisar nuestras decisiones respecto a los limpiadores que utilizamos y apostar por productos respetuosos con el medio ambiente; productos que podemos hacer en casa con el consiguiente ahorro de dinero. En estas páginas encontraremos ejemplos prácticos que nos sorprenderán.